'No les creemos nada, siempre son promesas incumplidas del gobierno': comunidad Otomí en la toma del INPI

Por Aarón Cruz Soto 

Ciudad de México.- La comunidad Otomí en la capital lleva años exigiendo una vivienda digna, pues fueron desplazados desde 2018, pues los desalojaron del inmueble que vivían en Roma 18, en la colonia Juárez, también han sido sacados de otros inmuebles, con el uso de la fuerza.

Desde 2018, la comunidad vivió en campamentos y tuvo que soportar la inclemencia del clima, pero ahora con la pandemia de Covid-19 la situación se ha agravado, pues no pueden vender las artesanías con las que se mantenían y la solución sobre los predios donde vivía no avanzaba. Es así que ante esta situación tomaron las oficinas del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI).

Exigen sean expropiados los terrenos de Zacatecas 74, Guanajuato 200, Roma 18 y se les sean entregados para poder vivir dignamente, pues durante años vivieron ahí y fueron sacados por negocios inmobiliarios.  

Aaron Cruz Soto
Foto: Aaron Cruz Soto

La toma inició el 12 de octubre del 2020, coincidiendo con la conmemoración del Día de la Raza, de esta manera, buscaban que fueran escuchados por las autoridades tanto locales como federales.

En entrevista para el Diario de México, las voceras de la toma del INPI indicaron que desde 1985 que ocuparon los predios no han tenido ninguna respuesta, denunciaron que el gobierno solamente les ha hecho promesas. 

“Siempre es mentira, nosotros no les creemos”, declaró una de las voceras.

“Si no hay solución, nos podemos quedar aquí 528 años, si aguantamos en el campamento, aquí también podemos quedarnos”, afirmaron sobre la duración de la toma.

Indicaron que han dialogado con las autoridades desde hace más de 20 años, pero hasta el día de hoy no hay avances.

Narraron que antes les propusieron habitar en el Estado de México, pues “ahí dicen que hay campo y eso nos gusta más, pero nosotros nos queremos quedar aquí, el gobierno no nos hace caso”, además, contaron que en Roma 18  incluso les llegaron a decir que “afeaban la colonia”. 

Aaron Cruz Soto
Foto: Aaron Cruz Soto

Sobre la situación de la comunidad Otomí durante la actual pandemia, la vocera Margarita indicó que ella perdió a su hijo por negligencia de los médicos, pues le decían “es solamente neumonía”, pero nunca le explicaron bien que tenía su hijo, ella tenía que comprar los medicamentos para poder atender a su hijo y llegaron al descaro de irla a buscar acusándola que había matado a su hijo, pero quien lo mató fue la institución de salud.

Explicaron que esta situación se agrava porque al ser desplazadas, no tiene comprobante de domicilio ni credencial de elector y las instituciones públicas como de salud y educación les exigen esos papeles para poder acceder a los servicios.

Indicaron que sus hijos no pueden recibir bien educación con la pandemia, pues no tienen acceso a internet y con las restricciones para vender sus productos, que en su mayoría son artesanías, no tienen dinero para pagar los útiles escolares.

“Esos apoyos que dice el gobierno que da son mentira, a nosotros nunca nos ha llegado ningún apoyo", declararon. 

 

 

 

Aaron Cruz Soto
Foto: Aaron Cruz Soto

Denunciaron que diariamente en la toma del INPI hay provocaciones y la policía federal les toma fotos, argumentando que es para cuidarlas.

Comentaron que en una ocasión estaba en una acción y llegaron los oficiales, tomaron fotos, rodearon la cuadra y cortaron la luz, por eso señalaron que es falso que no sean hostigadas.

Señalaron que con la toma, ahora si las instituciones de derechos humanos si se han acercado con ellas, pero antes, cuando vivían en los campamentos, nunca fueron a verlas.

Finalmente, pidieron la solidaridad del pueblo para que les ayuden con víveres y se solidaricen con su lucha.

Aaron Cruz Soto
Foto: Aaron Cruz Soto